Muchas veces hemos hecho referencia a la extensión geográfica del Prog Rock, la cual trasciende fronteras de países y continentes. Así podemos ver la evolución de la música progresiva a lo largo y ancho del planeta. Amplias latitudes y longitudes donde se destacan el Prog estadounidense, el italiano, el sueco, el Krautrock alemán, la emergencia del Prog en los países del ex bloque soviético, como Polonia, Rusia, Hungría y República Checa, el desarrollo en países asiáticos como India, Japón, Israel, el temprano desarrollo africano en Ghana, la presencia bastante constante en Australia o la explosiva expansión en América desde Canadá y México hasta Argentina, Brasil y Chile, sin descontar Venezuela, Perú o la peculiar peripecia en Cuba, demuestran que la cepa se esparció por el mundo desde sus orígenes hace 40 años y supo arraigar en distintos suelos, cada cual con su distinta fertilidad, gracias, entre otras cosas, a la vocación de fusión que el Prog Rock manifestó desde sus estados más embrionarios y que permitió el enriquecimiento con variados matices provenientes de las matrices culturales, artísticas y musicales vernáculas.
Si omitimos en la mención anterios al Prog británico, es precisamente porque fue allí, en las islas, en ese espacio a la vez conectado y aislado del resto, donde germinó la cepa originaria del Prog Rock. La historia de ese surgimiento y desarrollo hasta el final de su primera época de esplendor está notablemente contada en Prog Rock Britannia. An Observation In Three Movements, un documental de la BBC 4 producido en 2008, dirigido por Chris Rodley y emitido por primera vez en 2009, con reemisiones posteriores, como la última, de junio del presente año.
Con la consabida rigurosidad de la emisora inglesa, este documental pasa revista a tres etapas del Prog inicial hasta su decaimiento a fines de los '70. El filme está apoyado en nutrido material de archivo que ilustra momentos de las diversas bandas presentadas [Yes, ELP, Jethro Tull, The Nice, The Crazy World Of Arthur Brown, King Crimson, The Soft Machine, Caravan, Egg, Genesis, etc] así como aspectos de la sociedad británica de los '60 y de su juventud en particular.
También se nutre de entrevistas a protagonistas importantes de todo el proceso, como Arthur Brown [The Crazy World Of ...], Bill Bruford [Yes, King Crimson, Genesis], Robert Wyatt [The Soft Machine, Machine Mole], Ian Anderson [Jethro Tull], Steve Howe [Tomorrow, Bodast, Yes], Rick Wakeman [The Strawbs, Yes], Pete Sinfield [King Crimson], Phil Collins [Genesis], Gary Brooker [Procol Harum], Carl Palmer [The Crazy World Of ..., Atomic Rooster, ELP], entre otros, en los que se cuentan también periodistas, críticos, productores y diseñadores, como los casos de Joe Boyd o Roger Dean.
Asimismo da cuenta de las relaciones de esa nueva zona del Rock con otras matrices musicales [blues, jazz, clásica, folk, rock'n'roll, pop] para generar un amplísimo espectro de resultados fusionados, experimentales, transgresores, revolucionarios y trascendentes del encerramiento estilístico de los géneros previamente existentes. Especial mención debe hacerse al tratamiento de la Canterbury Scene, ya que suele quedar muy relegada al enfocarse el tema del Prog, quizás porque fue de los movimientos que más quedó en el ámbito íntimo y no saltó a los escenarios masivos como ocurrió con las bandas más emblemáticas.
No obstante, resultan llamativos algunos huecos en la historia. Si bien no faltan las menciones a las bandas más emblemáticas, resulta al menos sorprendente que las menciones a Pink Floyd sean tan escuetas y marginales, sin otorgarle protagonismo tanto en su raíz psicodélica como en su posterior momento de madurez [Dark Side Of The Moon, Wish You Were Here, Animals] como en la etapa de difusión masiva [The Wall]. Otro tanto ocurre con bandas que, si bien tuvieron proyección menor o quedaron alojadas en el espacio dedicado a las bandas de culto, tuvieron igualmente peso específico en el momento de consolidación del Prog, como los casos de Camel , The Moody Blues o Gentle Giant, sobre las cuales apenas si hay alguna fugaz alusión.
A pesar de este reparo, el tratamiento de lo que sí aparece resulta sólido y sustancioso, por lo cual, al ver este documental, cualquier espectador, enterado o lego en la materia, obtiene un panorama convincente de qué se trató el asunto.
A nuestro juicio, este documental es muy valioso, sobre todo si se trata de enfocar el surgimiento, el origen, la cepa primera del Prog Rock, desde las búsquedas renovadoras de los '60 tardíos, desde el Sgt. Pepper's Lonely Hearts Club Band y los intentos de Procol Harum , The Moody Blues, el temprano Pink Floyd y los emergentes Yes, Jethro Tull y King Crimson, pasando por el auge y apoteosis de las grandes creaciones conceptuales y los puntos de madurez de cada banda que dejan un muy selecto muestrario de los clásicos del género, atravesando también la expansión masiva de algunas de las bandas que se convierten en Rock de estadio, para públicos multitudinarios pero intelectuales y espirituales, distintos de los otros espectadores de Rock más viscerales y físicos, hasta llegar a la crisis del género de mediados de los '70 sobre todo con los embates del Punk arrasador que proclamaba Anarchy In The UK.
Claro está que este documental no cuenta toda la historia, sino solamente el primer capítulo, germinal, complejo y decisivo, que marcó el perfil central del Prog, a partir del cual se fueron delineando otras ramas, algunas subsidiarias, otras paralelas y otras de posterior desarrollo temporal.
A quienes algo conocemos de esa primera parte de la historia del Prog nos quedó la sensación de que falta la continuación, todo lo relativo a lo que se ha llamado el Neo Prog de los '80, el resurgimiento del sinfonismo en los '90 y '00, el aporte de la línea metálica para la formación del Metal Progresivo Sinfónico y tantas otras líneas que surcan el panorama actual, desde el Eclectic Prog, el Crossover Prog hasta el Post Rock, el Math Rock, el Avant Garde, etc.
Pero no hay que desdeñar lo que se tiene quejándose por lo que aún falta. Este Prog Rock Britannia es una idónea puesta a punto sobre ese capítulo del Rock que pareció terminado y enterrado, pero que resurgió más blindado y reforzado que nunca, reclamando sus fueros en función de las credenciales que aquella generación había dejado como legado.
Vale la pena, es disfrutable. Un buen material para el fin de año.
ABBEY ROAD dice:
ABBEY ROAD dice:
4.5 / 5 Yellow Submarines [No son 5 por los reparos mencionados]
Un gran saludo con los mejores deseos para el año que se aproxima.
Hasta la próxima.
muy bueno. gracias por el dato. gracias también por hacerme conocer a "glass hammer" me parece raro escuchar a una banda que la voz líder suena a yes, pero el acompañamiento por momentos hace recordar a EL&P. Como sea, gracias y saludos desde argentina,
ResponderBorrarEnrique
Gracias a ti por tu comentario y por seguir entrando a pesar del maldito cartel de advertencia acerca de no sé qué daño podría causar este sitio. Estoy viendo cómo mudar todo este contenido a otro blog. En fin, lleva tiempo y yo me tomé enero de receso para hacer vacaciones. Hasta pronto. Saludos desde Uruguay.
BorrarHermano te agradezco mucho que hallas compartido esto, hace mucho tiempo que lo quiero ver, la mayoría de bandas que salen aquí ya las conozco pero me impresionan la cantidad de bandas que me faltan por conocer y más aun la música clásica y barroca que es fundamental. Se volaron la barda con este documental... Un saludo enorme!
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